Leer es uno de las habilidades más fascinantes que tiene el ser humano.
Leer es descubrir mundos fantásticos, ampliar horizontes, entender emociones y circunstancias que a veces son ajenas a nuestra realidad.
Leer es, sin duda, el arma más potente para fomentar la empatía.
Ahora mismo estás leyendo estas palabras que han surgido de mi mente, que las he dejado brotar para poder conectar contigo a través del blog. Para que conozcas aquello que tengo dentro o que te quiero mostrar.
Lo más probable es que estés utilizando tu vista para descifrar cada una de las letras o a lo mejor me estás escuchando a través de tus cascos gracias a un lector de pantalla. O quizá estés utilizando una línea braille.
Para mucha gente el braille es algo extraño, unos símbolos que no se ven pero que se pueden tocar y que hay gente que no ve pero «tiene poderes especiales» para descifrarlos con el tacto.
Efectivamente, las personas ciegas o con muy poco resto visual lo emplean como medio para acceder a la información «escrita». Para distinguir un producto, leer una novela, interpretar un mapa en relieve o un cartel por ejemplo. Siempre que estos estén adaptados, claro.
Índice
El día del libro y la alfabetización en braille
El 23 de abril se celebró el Día del Libro en todo el mundo. El libro en sus diferentes versiones y evoluciones es un elemento importantísimo para acceder a mucha información: ya sea literatura, un libro de texto, instrucciones, documentación administrativa, una revista de ocio o especializada…
Es por esa razón que el braille es esencial para la alfabetización de las personas con discapacidad visual importante.
Con las nuevas tecnologías se ha intentado utilizar el audio como vehículo para hacer llegar la información a aquellos que no pueden leer texto impreso. Una especie de sustituto del braille.
Sin embargo, muchos estudios avalan la vital importancia del braille como método de alfabetización. Porque leer no es solo acceder al contenido sino comprender estructuras, seguir una linealidad del texto, percibir la forma de las letras, las palabras, las oraciones…
Con esto no quiero decir que el braille no es compatible con las nuevas tecnologías sino que deben conjugarse para beneficio de todos.
¿El audio puede sustituir la lectura?
No sé si sois muy aficionados a escuchar audiolibros o si los preferís a texto escrito o en braille.
En mi caso, tengo varias opiniones al respecto que se contradicen.
En mis años de estudiante grababa cintas y más cintas de cassette con las lecciones que tenía que aprender para evitar cansar la vista.
Tengo que reconocer que era un buen método porque entre la lectura para la grabación y la escucha de la misma un par de veces se me quedaba bastante bien el contenido.
Tuve también una época bastante complicada en la que me pasé 3 meses sin apenas ver la luz por unas úlceras en los ojos y los audiolibros y la radio fueron mi única salvación.
Sin embargo, siempre me han gustado los libros impresos, su tacto, su olor, el paso de las páginas… Cuando tengo un buen día puedo darme el verdadero placer de leer sin problemas durante horas.
Pero hay días en que los ojos no dan para mucho y es entonces cuando hay que recurrir al sonido.
Los audiolibros me parecen interesantes como concepto pero muchas veces no consigo centrarme en la historia o si lo hago, llega un momento que empiezo a pensar en algún detalle de la trama y me pierdo o me acabo durmiendo. En esto tiene mucho que ver el tipo audio y su grabación: si es con voz sintética o natural, el tono, la entonación, etc.
Leer en tándem
Afortunadamente tengo un «sistema» mejor. Tengo mi propia lectora de historias. Glo y yo leemos en tándem. La mayor parte de las veces Glo es la que lee y yo escucho y si es necesario buscamos algún «palabro» o dato curioso del libro por Internet.
Otras veces, para matar el gusanillo, leo yo algún capítulo.
Leer en tándem tiene sus ventajas porque puedes intercambiar opiniones, suposiciones, ideas… o cualquier comentario.
Los libros y las historias se llenan de más matices, de más perspectivas. Leer permite vivir otras vidas y compartir la lectura te permite vivir diferentes historias dentro de una sola. No hay nada más enriquecedor que eso.
¿Y el braille?
Afortunadamente, hasta hoy, no he tenido que recurrir al braille como método de lectura principal pero siempre me ha apasionado este sistema de lecto-escritura.
A vista puedo leerlo aceptablemente pero este año me he impuesto un reto: aprender a leer y escribir braille sólo con el tacto. Y en eso estamos. Ya os iré contando la experiencia.
Y vosotros ¿Qué método empleáis para acceder a la información? ¿texto impreso? ¿braille? ¿audio? ¿otro?