¿Qué pasaría si un chip pudiera devolver la vista? Descubre cómo Blindsight está a punto de revolucionar la accesibilidad visual (y no es ciencia ficción).
Índice
Tecnología sorprendente
En el ámbito de la accesibilidad visual, los avances tecnológicos están abriendo nuevas posibilidades para personas con ceguera y baja visión. Aunque muchas veces suelo ser más bien escéptica con productos «milagrosos» que suelen prometer la curación total de la ceguera. Por esta vez vamos a dar un voto de confianza al dispositivo del que hablaremos a continuación.
Blindsight se presenta como un avance revolucionario. Es un chip desarrollado por Neuralink, la empresa del controvertido Elon Musk. Este dispositivo podría devolver la visión a personas ciegas, incluso aquellas que han perdido ambos ojos o tienen dañado el nervio óptico, y promete cambiar la forma en que entendemos la discapacidad visual.
No es el primer proyecto de la empresa tecnológica en este ámbito. Su primer chip en 2020 permitió a personas con parálisis controlar dispositivos electrónicos con su mente.
¿Qué es Blindsight?
Blindsight es un implante cerebral que se coloca en la corteza visual del cerebro que es la región responsable de interpretar las señales visuales. Este chip tiene la capacidad de enviar información visual directamente al cerebro sin necesidad de que se obtenga por los ojos y se transmita por el nervio óptico.
De esta manera, personas que han perdido la vista debido a lesiones o enfermedades podrían volver a ver, e incluso aquellos que nacieron ciegos podrían experimentar la visión por primera vez. (Esta última parte resulta más complicada de comprender aunque habrá que ver cómo evoluciona el desarrollo del chip.)
¿Cómo Funciona el Chip?
El chip Blindsight transforma las señales visuales en impulsos eléctricos que el cerebro puede interpretar como imágenes. Aunque en sus primeras versiones la calidad de la visión será baja, similar a los gráficos de los primeros videojuegos, el objetivo es mejorar esta resolución con el tiempo. Eventualmente, el chip podría permitir a las personas ver en espectros de luz que normalmente son invisibles al ojo humano, como el infrarrojo o el ultravioleta.
La innovación de Blindsight
Este chip ha recibido la condición de «dispositivo revolucionario» por parte de la FDA, la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense que asegura que los alimentos, medicamentos, cosméticos, instrumentos médicos y otros productos sean seguros para los consumidores. Este reconocimiento permite acelerar el desarrollo y comenzar a realizar pruebas clínicas más exhaustivas.
Aunque aún falta tiempo para su implementación general, Blindsight promete revolucionar el campo de la accesibilidad, proporcionando una solución que no solo adapta el entorno a las personas con discapacidad visual, sino que podría devolverles una capacidad tan crucial como la vista.
El potencial de Blindsight para mejorar la calidad de vida de personas ciegas es inmenso. No se trata sólo de «poder ver lo que nos rodea» sino de recuperar autonomía, independencia y una mayor participación en la vida cotidiana.
¿El futuro de la visión?
La visión del futuro que propone Neuralink con Blindsight es una en la que la tecnología no solo compensa las discapacidades, sino que las supera, proporcionando soluciones que antes solo existían en la ciencia ficción.
Para quienes tenemos baja visión o ceguera esto podría ser toda una revolución. Si el dispositivo cumple todo lo que promete será maravilloso y un gran cambio para muchas personas. Sin embargo, habrá que seguir el proceso con cautela y ver cuál es el resultado final.
Es verdad que la tecnología ha evolucionado un montón en las últimas décadas pero también hemos conocido muchos proyectos que al final se quedaron en nada. Además el tema de la visión es bastante particular así que estaremos expectantes a ver donde nos lleva el chip de Neuralink y seguiremos muy de cerca todas las noticias al respecto.
Y a ti ¿Qué te parece Blindsight?
Participar en los ensayos clínicos
Neuralink ha abierto la posibilidad para que personas con discapacidad visual participen en los ensayos clínicos de Blindsight aunque existen varios requisitos y está restringido para EE.UU., Canadá y Reino Unido. Los interesados pueden registrarse a través de la página oficial de Neuralink en la sección «Patient Registry».
Más allá de lo polémico que resulta este personaje, no deja de ser un millonario con trayectoria. Si el proyecto no llega a concretarse, es más probable que sea por controversias en torno de la forma en que se preste el consentimiento u otros motivos éticos que porque el capitalista, como ha ocurrido con otras empresas que en el pasado prometieron proyectos similares, se esfume de la escena.
Dejando a un lado este tipo de controversias no exentas de cierto aire conspiranoico aun para mí al formularlas, supongo que para quienes nacimos ciegos sigue restando por resolver —igual que con otros dispositivos similares de que se habló años atrás— el hecho de que, por no acostumbrado, el cerebro no sabría interpretar estos impulsos que, recibidos de forma continua, llevan a mareos o cosas peores.
Hoy en día, asimismo, es inevitable pensar tanto en las implicaciones de privacidad si resulta que el dispositivo puede o necesita conectarse a internet y, dado lo que hoy se sabe sobre nuestros impulsos irracionales que los proveedores de bienes y servicios aprovechan para que compremos compulsivamente, en la posibilidad de que un dispositivo como este no se emplee asimismo para reforzar subrepticiamente esta clase de impulsos. Ello por no mencionar escenarios como el que graficaba Dick en «Podemos recordarlo por usted al pormayor» aplicado a cosas más serias.
¡Gracias por compartir y a ver qué pasa!