El proyecto begIA se basa en una aplicación móvil con inteligencia artificial que puede detectar en muy poco tiempo si tienes una enfermedad ocular.
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Apps para detección y control de discapacidad visual
La inteligencia artificial nos sorprende cada día con nuevas o mejoradas aplicaciones en todos los ámbitos. En el campo de la discapacidad visual se está empleando para múltiples proyectos e iniciativas que pueden ayudarnos a mejorar tanto la detección de enfermedades como en su control. Y ya no digamos en el bienestar de las personas con baja visión o ceguera.
En el artículo de hoy hablaremos de un proyecto que emplea Inteligencia Artificial y algoritmos para detectar enfermedades oculares: begIA. Un proyecto que nos recuerda mucho a TrackAI de Huawei del que ya hicimos un artículo en 2019. Muchas similitudes entre ambos aunque también es verdad que tanto la IA como las tecnologías evolucionan a pasos agigantados y 4 años son muchos.
Y si hablamos de apps relacionadas con la discapacidad visual tampoco nos podemos olvidar de un prototipo que allá por 2014 estaba desarrollando la Universidad de Stanford y que permitía controlar el glaucoma solamente con un selfie.
Pero centrémonos en begIA.
BegIA
La discapacidad visual afecta a millones de personas en todo el mundo, y la detección temprana de enfermedades oculares es clave para prevenir la pérdida total de visión.
En respuesta a esta necesidad, Igor García Atutxa y Francisca Villanueva, dos estudiantes del máster universitario en Bioinformática y Bioestadística de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) han creado begIA, una aplicación móvil con inteligencia artificial que promete detectar en pocos segundos y mediante un selfie, enfermedades oculares como el glaucoma, la retinopatía diabética o las cataratas, facilitando así el acceso a un diagnóstico temprano y permitiendo un seguimiento médico a distancia.
Cómo funciona begIA
BegIA utiliza técnicas de Inteligencia Artificial (IA) y un algoritmo de redes neuronales para analizar fotografías faciales y emitir prediagnósticos oftalmológicos. Si la aplicación detecta algún indicio de enfermedades oculares, guiará al usuario hacia el especialista adecuado para un diagnóstico y tratamiento más precisos.
Para entrenar al algoritmo se han utilizando imágenes proporcionadas por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, México, donde la investigadora Villanueva realiza sus investigaciones. Aunque el aprendizaje continúa y ya están trabajando con otras entidades para obtener más imágenes con mayor variabilidad, lo que permitirá optimizar los resultados de begIA.
El comienzo: una motivación personal
Igor García Atutxa y Francisca Villanueva, los creadores de begIA, encontraron su inspiración en una experiencia personal, cuando un familiar con diabetes tipo 2 comenzó a perder la visión debido a una retinopatía diabética. Este hecho los impulsó a desarrollar una herramienta que pudiera prevenir situaciones similares en otras personas mediante la detección temprana.
Facilitando el acceso a la atención temprana
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 2.200 millones de personas en el mundo tienen baja visión o ceguera, y la mitad de los casos podrían haberse evitado con diagnósticos más tempranos.
La detección temprana de enfermedades oculares generalmente requiere un examen exhaustivo del fondo del ojo, lo cual no siempre es fácil de conseguir en zonas rurales o países con pocas infraestructuras médicas, sanitarias o de cualquier tipo..
El objetivo de begIA es proporcionar un sistema de detección y seguimiento a través de fotografías faciales, favoreciendo una primera valoración y evitando que los pacientes tengan que desplazarse innecesariamente.
Además, el sistema permitirá a los profesionales realizar un seguimiento médico de los pacientes a distancia: valorar la eficacia de tratamientos, evaluar el estado del ojo y su visión, etc.
Reconocimiento y premios
El proyecto begIA ha sido reconocido y galardonado como ganador del Premio Ramón Molinas Foundation al Impacto Social en la edición 2023 del SpinUOC. Este programa de emprendimiento y transferencia de conocimiento de la UOC ha respaldado la iniciativa, que busca contribuir a la prevención de la ceguera, en línea con los principios del proyecto VISIÓN 2020 desarrollado por la OMS.
La discapacidad visual es una realidad y la tecnología se ha mostrado como una gran aliada siempre que se utilice de manera adecuada y se apueste por ella. Cada cierto tiempo surgen proyectos y prototipos que luego se quedan en el limbo. Esperemos que, en este caso no sea así y que begIA logre prevenirlos máximos casos de ceguera en todo el mundo.